Más beneficios del ajo crudo

Dos grandes filósofos como son Galeno e Hipócrates ya descubrieron los beneficios del ajo crudo para combatir parásitos, digestiones lentas, gripe, falta de energía, fiebre y problemas bronquiales. Es muy efectiva para prevenir y tratar los diversos tipos de enfermedades respiratorias. El ajo contiene agua, hidratos de carbono y fibra, y en menor medida posee proteínas, minerales y vitaminas.

En la alimentación mediterránea se usa el ajo por todos estos beneficios para la salud, es recomendado para la hipertensión porque evita posibles trombosis, ayuda a bajar el colesterol, previene la arteriosclerosis y los accidentes vasculares, mejora la circulación sanguínea, hay una cura de ajos crudos para reducir la tensión arterial.

El ajo ayuda a desaparecer los residuos del organismo, por otro lado no engorda a no ser que se coma frito y las enzimas favorecen la síntesis de los ácidos grasos.

Una capsula de ajo gelatinizada antes de dormir ayuda a reducir la ansiedad y los problemas nerviosos que nos proporcionan un mal descanso.

Como estamos viendo, los beneficios del ajo crudo son muchos, y entre ellos existe su acción diurética, combate los gases intestinales, evita el estreñimiento, contiene sulfuro que reduce la inflamación, todo esto ayuda a mantener la hinchazón abdominal lejos de nosotros.

Contiene una sustancia que se llama alicina y aumenta las secreciones bronquiales, esto lo convierte en un buen expectorante, descongestionante y desinfectante. Por otro lado es recomendado para combatir la fiebre porque es destructor de las bacterias y microbios que la ocasionan, el ajo tiene gran poder alcalinizante, bactericida y neutralizador. Por otro lado aumentan las defensas inmunológicas y se usa como remedio casero en casos de resfriados, asma, catarro, neumonía y bronquitis. Hay muchos platos que incluyen el ajo, esto es porque la alimentación mediterránea siempre ha cuidado de nuestra salud.